Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2014

Miércoles.

Érase una vez, un día con olor a sangre. Una madre con dolor de parto. Un médico con mil y un cosas que tratar, más cesárea. Una oración por terminar. Otras por empezarse. Dos mujeres, un chico, y un papá. El dolor, la aguja, el desnudo, la presión, el golpe, mi voz. Así nació Elizabeth. 

Fénix.

Bésame, bésame y conocerás que mis labios son ajenos. Una vez fueron mios, y otro día ya no.  Otro los amó tanto, que los guardó.  Pero bésame y descúbrelo. O bésame y besa mis cenizas. Bésalas y renace mis labios. Devuélmelos y te los regalaré. No me importaría volver a perderlos a cambio de recuperarlos.

De aquí y de allá.

Soy una mujer de gustos simples y palabras complicadas. De pocas pasiones, y grandes aventuras. Con caprichos caros y bendiciones diarias. Es más la preocupación, que la responsabilidad. Pero se refleja lo contrario. Con todo, no puedo aceptar que mi felicidad se resuma en mi libertad. No. Soy una mujer que aunque le llegue a quedar corta la palabra amargura o soltería, no dejará de pensar que hay alguien que vera todo.  Y lo hará. Todo. Por ella. De confesiones e indiscreciones, y con indirectas escritas por toda su historia.

Cobarde.

Sabe Dios que no me gusta borrar. Mis recuerdos y mi pasado es preciado. Incluso el que incluye los momentos feos. Pero otra parte de mi desea jamás mencionarte, jamás hacerte caso, jamás importarme lo que haras. Pobre ingenua parte de mi, porque sé, que aunque llegará el día en el que no me dolerá , no llegará en el que te elimine por completo. No. Fuiste un gran amor, claramente (para mi) fue mayor la traición, pero en sus momentos, trajiste grandes alegrías, que no quiero saber cuántas fueron honestas y cuántas solo para intentar atraparme más.  No es tan fácil aceptar la situación e ignorarte, porque yo no puedo ni quiero borrar los 4.5 años juntos. Me dejaste claro lo bien que tu lo haces, y no puedo menospreciar tus habilidades de contador de cuentos tampoco. Pero yo no soy así. Me pesa no ser así, le pesa a mi familia y también a mis amigos cercanos. Pero saben todos, que es lo correcto, lo maduro y lo digno. Ansío la parte del "no dolerá", pero afronto, sin nada que o...

7 de enero.

Cómo puedes confiar en alguien cuyos sentimientos son manejados por lo mucho o poco que le permitas manejar tu agenda? tu futuro? tu compromiso? tu.. todo? Como pueden creer que todo acabó como empezó? Que les hace creer la mentira del estamos bien y "seguimos siendo amigos"?  Qué les hace creer? Qué dice? Cómo? Con qué bases argumenta sus acciones que son tan aplaudidas?  Díganme. Grítenmelo. Restriégenme en la cara toda la historia. Háganmela creíble a mi también. Qué no estoy viendo? O qué estoy imaginando?  Cómo es que me volví invisible? Por qué yo debo ser insensible?  No importa ya. ¿? No es esa mi carga ¿? De nada me ayuda ¿? Soy una fuerte porque no me permito caer, pero definiticamente cada vez pesa más el ser así y el caminar casi a ciegas con todo la contaminación que genera tu tan aclamada felicidad.  Las heridas que deben, y van, a sanar no son tan superficiales como muchos aseguran lo son. Mis sentimientos no fueron creados por pasiones carnales, ...

Tu eres todo para mí.

Hay personas inmaduras, tontas y que dan pena ajena. Otras son ridículas, idiotas y sinvergüenza. Podrían parecer sinónimos, pero cuidadosamente... no lo son. También existen aquellas que rebasan todos esos límites y muchas veces para referirse a sus acciones se usan palabras altisonantes que no incluyo en mi vocabulario diario. Tu hasta hoy, eres todo eso para mí. Pero cada vez logras sorprenderme, y superarte a ti mismo. Felicidades. Algún día, Dios sabe cuando, lo verás tu también, provechosamente y para tu infortunio lo verás tú, y tú mundo. Ese mundo a quien delicadamente has engañado, saboteado, e hipnotizado. Cercana o lejanamente, el título te valdra poco (por el bien, poco y no mucho). Posiblemente a mí también. Pero ese día, ocurrirá, llegará... y no por mí. Sólo por justicia, sí, justicia. Dios también oye mi clamor. Mi suplica y mis oraciones de perdón y arrepentimiento. También a mi. Pues tu eras todo para mí.