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Antes de que terminase el mes, quería cumplir con un pequeño propósito (de esos que no quieres ni publicar porque presientes que no los cumplirás), que quien sabe, ahora que lo veo, tal vez el secreto es hacer de todos mis propósitos "pequeños propósitos", o simplemente no clasificarlos tan estrictamente para así, como éste, poder cumplirlos todos antes de que termine el 2015. El propósito era: adiós borradores.

He publicado todos mis escritos en borrador. Borradores que están ahí, algunos desde 2011, y que sólo me detenían a recordar lo inconcluso que dejo las cosas. Debo confesar que también hubo borradores que eliminé por no haberlos terminado nunca y ahora al leerlos no tener ni idea de por qué alguna vez uní esas palabras.

Como de confesiones se trata (desde el 2013 he desarrollado este gusto: ¡el de confesar!), tienen que saber que la carpeta de borradores, aún después de este atropello y sobre carga al blog, no esta en ceros, pues he escogido el blog para guardar recetas de cocina, y listas de lugares para visitar.

Como soy muy egoísta para compartir esas recetas de cocina (mas no para invitarlos a comer algún día), las he dejado ahí, escondidas para ustedes, y a "la mano" para mi.

Espero este año tenga tiempo de volver a los escritos completos, y no caer en el mal vicio de los borradores.